El precioso municipio de Villanueva del Fresno se encuentra situado en el extremo meridional de la comarca de Olivenza, muy próxima a la frontera portuguesa.
Gracias a su reconstrucción total, tras ser arrasada por las tropas portuguesas en el siglo XVII, tiene un trazado de calles rectas y amplias que realzan la sobriedad de sus casas blanqueadas a dos alturas. Su vida social gira en torno a la hermosa plaza de España, donde se encuentra el Ayuntamiento y la iglesia de Nuestra Señora de la Purísima Concepción, del siglo XVII.
En cuanto a monumentos históricos, cabe destacar las ermitas del Cristo de la Expiración, la de San Antonio y la de San Ginés de la Jara, patrón de la localidad. Las ruinas del castillo y el puente de la Bogaña, situado en el entorno del río Alcarrache, también merecen especial atención.
Posee, también, uno de los entornos naturales más importantes de la comarca con 35.000 hectáreas de dehesas y el 70% de su naturaleza protegida por la Red Natura 2000. Presenta, además, una zona ZEPA para la observación de aves esteparias y dos áreas protegidas: el Corredor Ecológico y de la Biodiversidad "Río Alcarrache" y la Zona de Especial Protección para las Aves "Sierra de Jerez". Asimismo la localidad está regada por el Gran Lago de Alqueva, con una costa de 22,5 kilómetros, lo que le ha ofrecido espectaculares paisajes y un florido desarrollo económico y turístico.
Pero es sin duda La Amanita ponderosa o Gurumelo lo que le da fama a la localidad, pues con las Jornadas Transfronterizas dedicadas a este hongo, se han convertido en referente tanto para la región como para el Alentejo portugués.